1. Comprar con tus colores, mirando solo prendas con esos colores (para esto es necesario realizar un análisis de colorimetría y determinar la paleta de colores más favorable para cada persona)
2. Estar al tanto de las tendencias de la moda en cuanto a colores: ver qué tonos de tu paleta están de moda y eligir el más sentador.
3. Aprender a decir no a los vendedores (que intentan hacernos comprar prendas que no nos quedan bien o que no son las adecuadas para nuestras características físicas)
4. Encontrar un/a vendedor/a que sea de tu estación, es decir, cuya paleta de colores sea similar o igual a la tuya.
5. No comprar con un/a amigo/a al menos que entienda tu estación y los colores que integran tu paleta.
6. No hacer compras compulsivas: comprá las prendas que más te hagan falta en base a tus actividades y ocupación, en orden de prioridad.
7. Invertir más dinero en las prendas que más usás.
8. Estar bien vestida/o a la hora de comprar, esto te permitirá:
a) poder juzgar mejor cómo te quedan las prendas que te probás y
b) recibir mejor atención.
9. Tener una rutina para hacer compras siguiendo este orden:
a) encontrar tu talle
b) elegir las prendas en los colores que te favorecen
c) ver la "personalidad" de los equipos: ¿te ves reflejado/a o no?
d) ver el estilo y el corte de la prenda
e) sentir la tela
f) probarse la prenda considerando la posibilidad de modificarla con una modista. En numerosos casos uno no adquiere una prenda por detalles que pueden ser arreglados con facilidad (por ejemplo, el largo de una manga)
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